TRAILERS

Siempre he sido un gran aficionado a los trailers. A los de siempre, quiero decir, a esos que te mentían un poquito porque esa era exactamente su obligación, pero que al mismo tiempo tenían en su esencia un halo de honestidad y de rigor que pasado un tiempo podías comprobar.

La misión de un trailer es convencer y atrapar al futuro espectador y yo he sido de esos que, siendo un niño y adolescente (y adulto, que coño) he llegado a ir al cine simplemente porque sabía que iban a poner un trailer determinado.

Lo de menos era la peli que ibas a ver, lo importante era el trailer. Hace muchos años, en una galaxia muy lejana, ver un trailer de una película esperada significaba que podías llegar a verlo durante treinta veces a lo largo de seis meses antes de tener la oportunidad de, por fin, ver la película. y eso....era mucho tiempo.

De esta manera, uno era capaz de tragarse verdaderos espantos, pero a la postre no importaba, porque en la retina y sobre todo en la imaginación quedaban largos ratos en los que rememorar esos segundos que el esperado trailer nos había regalado abriendo todo tipo de esperanzas.

Así, uno ha llegado a crear verdaderas aventuras,tardes enteras de maravillosas especulaciones, aventuras estas que, por otro lado, nunca serían rodadas (¡que desgracia!)

Esa ha sido para mí la gran diferencia entre el trailer y la película. Vista la película se acaban las posibilidades. La historia es la que es. te guste o no. Pero el trailer, bendito sea, el trailer siempre ha ido mucho más allá.

El trailer es la puerta que se abre dejándote a oscuras para que tú ilumines el camino. El trailer es el conjunto de ideas desorganizadas que te regalan durante un minuto para que tú las ordenes como mejor te convenga. El trailer te permite, eso si, durante tiempo limitado, que tú seas el guionista y director.

Esa ha sido siempre su maldición: La fecha de caducidad; porque el trailer deja de existir en el momento en el que la película llega a las salas y el misterio, el abanico de posibilidades ya no tiene ningun valor.

Hace unas semanas, fui al cine a ver STAR TREK un poco a regañadientes. Dado que la peli a priori no me seducía nada, concentré mi interés en los trailers que iban a proyectar. error fatal.

He tenido que hacer un verdadero esfuerzo para recordar los tres títulos que proyectaron:

El primero fué TERMINATOR: SALVATION

El segundo fué TRANSFORMERS 2.

El tercero fué G.I JOE.

A día de hoy soy incapaz de recordar que imágenes pertenecen a que trailer. Todo era igual.Ruido y máquinas muy parecidas pegando hostias y rompiendo todo lo que aparecía en pantalla.
Intentar recoger algo de semejante oferta y plantear algo a la imaginación hubiera acabado sin ninguna duda en lobotomía.

Dejo aquí una prueba de un tiempo en el que los trailers tenían una fuerza acojonante. sin hostias, sin explosiones, sin montajes frenéticos, sin directores y ejecutivos gilipollas.

Imagina que tienes doce años y ves esto.....